CONTRA LA IMPUNIDAD

“(…) un ejemplo claro del rechazo de las conclusiones de la Comisión de la Verdad lo constituyó la aprobación de una amplia ley de amnistía pocos días después del Informe de la Comisión. La celeridad con que esta ley se aprobó en la Asamblea Legislativa puso de manifiesto la falta de voluntad política de investigar y llegar a la verdad mediante medidas judiciales y castigar a los culpables”.
Kofi Annan, en su balance final del llamado proceso de paz salvadoreño"

sábado, 2 de febrero de 2013

TESTIMONIOS: Dr. Jose Hernán Canizalez


...cuando terminamos los estudios de medicina nos pusimos de acuerdo los 3 ( denis , godoy y yo ) y de Moscú partimos juntos jugando AJEDREZ y echándonos los "traguitos" en todo el viaje en AEROFLOT con Dr. Godoy y Dr.Denis.

Llegamos al aeropuerto de Cuba y con los últimos dolares en bolsa nos echamos las cervezas con Dr. Godoy, luego, de una calurosa espera seguimos hasta Managua. En Managua nos distribuyeron a diferentes departamentos.  

Estando yo en Jalapa, un minicipio grande fronterizo con Honduras, en una ocasión acompañé a un grupo voluntario a una jornada de cortas de café ... caímos en una emboscada de la contra, yo creí en esos momentos que ese era mi fin, pero llegó un contingente del ejército sandinista que nos protegió  ... me tocó que atender heridos y evacuar a los muertos en un camión a toda velocidad de regreso, junto con el miedo a que nos dispararan un bazucazo.

Ya en la noche, fuera del peligro, me puse una borrachera de consolación  por el milagro de no haber muerto. Me puse a pensar que mejor me fuera a morir a El Salvador y no en una región tan lejos en donde me encontraba. 

Y así, con el contacto con la gente del partido (como si yo fuera mambrú, el de los miserables de Víctor Hugo) me fui a la guerra. Me "volè" un año en  Jucuarán , Usulután. Ahì el trabajo era logístico,  me tocó hasta cargar en el lomo manojo de fusiles o a veces municiones junto a gente organizada de masas.  También atender población en zonas rurales en disputa con el ejercito. 

Disfruté el mar del Espino, me bañé como loco, de tanto tiempo de no estar en una zona costera y bebiendo mucha agua de coco. Posteriormente fui enviado por orden de la comandancia a la zona de los Cerros de San Pedro (lo curioso que ahí no existen cerros, todo es plano) y ahí me incorporé al batallón Rafael Aguiñada carranza, en el pelotón de médicos y brigadistas.

Ahí si viví el infierno de la guerra, pues me tocaba estar detrás de la linea de fuego con los compas, y evacuar al que estaba herido.

En cierta ocasión que fui a una misión u operativo me tocó llevar en hombros a un herido en medio de un incendio o en llamaradas candentes de leñas a ambos lados de un camino,  uuuta mano !!  pero que feo sentir que te estas quemando o calentando como si te estuvieran asando, mas la humazón fuerte y los helicópteros y aviones encima bombardeando y ametrallándote en todos los lugares que estábamos replegándonos con los heridos al hombro.  Me acordé de una obra de Dante Alligiery (ahorita no recuerdo el título  pero habla sobre el infierno), yo todavía sigo creyendo que lo viví .

Esa vez, ya cuando estábamos en las zonas libres y seguras, me comí 4 tortillas de las grandes con un gran pedazo de carne de res que nos tenían ya preparados para los que habíamos participado en esa misión. 

  Después de tantas misiones y enfrentamientos con el enemigo, llegó la orden de la comandancia general del frente de reestructurar el batallón  y me desplazaron junto a compañeros del batallón a Guazapa (esto sobre el segundo y tercer año ), y otro grupo se fue a Jucuarán y otros se quedaron en los cerros de San Pedro.

  GUAZAPA : Llegué  a los cerros de Guazapa con las piernas temblorosas, pues Guazapa tenía fama de ser una zona diariamente muy conflictiva . Ahí me incorporaron en las fuerzas especiales de la FAL, y me tocó realizar misiones muy estratégicas : El ataque al penal de la Esperanza en Mariona, cuando rescatamos 7 compañeros y salieron huyendo 150 presos comunes que nada que ver con nosotros.

El ataque a la subestación de Nejapa, en la cual tuvimos bajas de compañeros muy valiosas., Me tocó la misión de cuidar y ser el médico de cabecera de la hija del presidente Duarte en ese entonces, fue entregada sana y salva a una delegación Internacional en una cancha de fútbol de Tenancingo y salieron libres compañeros presos políticos de Mariona. Y a mi me felicitaron de parte de la Comandancia por haber cumplido mi labor como tal . 

Después de esa misión nos bombardearon y ametrallaron con aviones caza y helicópteros artillados toda una tarde, pero como yo a esas alturas de la guerra ya estaba acostumbrado, así que me quedé dormido mientras el enemigo nos ametrallaba y bombardeaba, y al final no tuvimos ninguna baja, ni muertos y heridos.

Si te das cuente en este pequeño relato, no escribo fechas y horas, pues en la guerra uno pierde la noción del tiempo y espacio, la cabeza se desequilibra, a veces yo en lo personal esperaba la muerte como si esperaba la hora de comer, muy conforme.

             En la próxima, te escribo, como estoy viviendo las horas extras de mi vida.
                                   atte. Dr. Jose Hernán Canizalez V.  (daniel)

campaña permanente

Desde el Municipio de Santa Ana, El Salvador, PEDIMOS...


Al Concejo Municipal de Santa Ana: reivindiquen la memoria de nuestras víctimas... reconstruyan su monumento...

Monumento a las victimas civiles del conflicto

Monumento a las victimas civiles del conflicto
Las víctimas civiles de la guerra viven en nuestra memoria con la fuerza de la verdad, muchas veces oculta por sus propios asesinos, que permanecerán escondidos a la sombra de la impunidad...Solo la verdad y la justicia podrá llevarnos hasta el perdón y a la tan ansiada reconciliación...El horror que aquí vivimos no lo debemos olvidar, para que las futuras generaciones no repitan los errores de nuestra sociedad. Santa Ana, 25 de julio de 2007 (esta es la leyenda que rezaba la placa destruída en el monumento a las víctimas civiles del conflicto)
Ubicado en Carretera de Santa Ana hacia Metapán, cercano a la frontera con Guatemala. La construcción de monumentos a las víctimas es una forma de reparación moral, un Derecho a la Memoria, un compromiso de no repetir los crueles errores...
A menos de un año de construído, fue destrozado parcialmente, incluyendo la placa de bronce colocada con la leyenda. Es por tal razón que pedimos acompañemos este repudio moral, a quienes lo hicieron....
Ahora nuestra denuncia es por que las autoridades municipales de Santa Ana no han querido reconstruir el monumento... nuestro monumento.... aún cuando hay un convenio en el cual es responsabilidad de la comuna dar el mantenimiento.