CONTRA LA IMPUNIDAD

“(…) un ejemplo claro del rechazo de las conclusiones de la Comisión de la Verdad lo constituyó la aprobación de una amplia ley de amnistía pocos días después del Informe de la Comisión. La celeridad con que esta ley se aprobó en la Asamblea Legislativa puso de manifiesto la falta de voluntad política de investigar y llegar a la verdad mediante medidas judiciales y castigar a los culpables”.
Kofi Annan, en su balance final del llamado proceso de paz salvadoreño"

sábado, 30 de junio de 2012

Tatyana "Tanya" Nikoláyevna Sávicheva (en ruso: Татьяна "Таня" Николаевна Савичева)

Tatyana "Tanya" Nikoláyevna Sávicheva (en ruso: Татьяна "Таня" Николаевна Савичева), (25 de enero de 1930 - 1 de julio de 1944) fue una niña rusa que escribió un breve diario durante el asedio de Leningrado en la Segunda Guerra Mundial. El diario que escribió era corto pero conmovedor.
Entre los documentos presentados como prueba en los Juicios de Núremberg se encontraba una pequeña libreta que perteneció a la escolar Tania Sávicheva, de Leningrado. Hay fechas en seis páginas, con una muerte asociada a cada una. 

Seis páginas — seis muertes. Nada más, solo notas breves y concisas y una observación final: Zhenia murió el 28 de diciembre de 1941, a las 12:30 horas. La abuelita murió el 25 de enero de 1942, a las 3:00 p.m. Leka murió el 17 de marzo de 1942, a las 5:00 a.m. El tío Vasia murió el 13 de abril de 1942, 2 horas después de la medianoche. El tío Lesha el 10 de mayo de 1942 a las 4:00 p.m. La mamá el 13 de mayo de 1942 a las 7.30 a.m. Los Sávichev murieron. Murieron todos. Solo quedó Tanya. Tatyana "Tanya" Sávicheva era la más joven de la familia de un panadero, Nikolái Rodiónovich Sávichev, y una costurera, Mariya Ignátievna Sávicheva. Su padre murió pronto, cuando Tatyana tenía solo seis años, dejando a Mariya Sávicheva con cinco hijos — tres niñas, Tania, Zhenia y Nina, y dos niños, Mijaíl y Leka. 

La familia planeó pasar el verano de 1941 en el campo, pero la invasión de la Unión Soviética por parte de Alemania el 22 de junio arruinó sus planes. Todos, excepto Mijaíl, que ya se había marchado, decidieron quedarse en Leningrado. Todos ellos trabajaron para apoyar al ejército. Mariya Ignátievna cosió los uniformes, Leka trabajó como cepillador en la Fábrica del Ministerio de Marina, Zhenia en la fábrica de munición, Nina en la construcción de las defensas de la ciudad. El tío Vasia y el tío Lesha sirvieron en la defensa antiaérea. Tanya, que entonces tenía solo once años, cavaba las trincheras y ponía fuera las bombas incendiarias. 

Un día Nina fue a trabajar y no regresó. La enviaron al lago Ladoga y después fue evacuada urgente. La familia no estaba consciente de esto y pensó que había muerto. Tras unos días, en memoria de Nina, Mariya Ignátievna le dio a Tanya una pequeña libreta que había pertenecido a su hermana y que se convertiría después en el diario de Tatyana. 

Sólo entonces fue cuando Sávicheva tuvo un auténtico diario una vez, un cuaderno grueso en el que anotaba todo lo importante que le sucedía. Lo quemó cuando ya no había nada más para alimentar la estufa en invierno, pero conservó la libreta de su hermana.

campaña permanente

Desde el Municipio de Santa Ana, El Salvador, PEDIMOS...


Al Concejo Municipal de Santa Ana: reivindiquen la memoria de nuestras víctimas... reconstruyan su monumento...

Monumento a las victimas civiles del conflicto

Monumento a las victimas civiles del conflicto
Las víctimas civiles de la guerra viven en nuestra memoria con la fuerza de la verdad, muchas veces oculta por sus propios asesinos, que permanecerán escondidos a la sombra de la impunidad...Solo la verdad y la justicia podrá llevarnos hasta el perdón y a la tan ansiada reconciliación...El horror que aquí vivimos no lo debemos olvidar, para que las futuras generaciones no repitan los errores de nuestra sociedad. Santa Ana, 25 de julio de 2007 (esta es la leyenda que rezaba la placa destruída en el monumento a las víctimas civiles del conflicto)
Ubicado en Carretera de Santa Ana hacia Metapán, cercano a la frontera con Guatemala. La construcción de monumentos a las víctimas es una forma de reparación moral, un Derecho a la Memoria, un compromiso de no repetir los crueles errores...
A menos de un año de construído, fue destrozado parcialmente, incluyendo la placa de bronce colocada con la leyenda. Es por tal razón que pedimos acompañemos este repudio moral, a quienes lo hicieron....
Ahora nuestra denuncia es por que las autoridades municipales de Santa Ana no han querido reconstruir el monumento... nuestro monumento.... aún cuando hay un convenio en el cual es responsabilidad de la comuna dar el mantenimiento.